Hacia un nuevo contrato social en América Latina
El miedo no está solo en Europa. Los datos del latinobarómetro, la encuesta que desde hace 25 años mide el pulso económico y social de América Latina, muestra que, aunque el apoyo a la democracia como forma de gobierno sigue siendo mayoritario, ha aumentado el grupo de indiferentes. O lo que, es lo mismo, el número de personas a las que les da igual tener una democracia que una dictadura.
Las desigualdades, que empezaban a ser reducidas en América Latina, están con toda probabilidad en la base de este cuestionamiento creciente de todas las formas y colores parlamentarios, y los Gobiernos muestran limitaciones para resolver el día a día de una ciudadanía cada vez más dependiente del empleo informal y más afectada por diversas violencias.