Hasta hace apenas unos meses, solíamos decir que existían dos mundos, un físico y otro virtual, pero la realidad es que no hay dos vidas. Existe una sola vida – física y virtual. La pandemia del COVID-19 ha acelerado de forma vertiginosa la transformación digital de nuestras sociedades y de nuestras economías. En unas semanas de confinamiento hemos avanzado en adopción y uso de las tecnologías lo que hubiéramos avanzado un lustro en condiciones de normalidad.
Las telecomunicaciones se han confirmado como un sector vital en las sociedades contemporáneas. De hecho, la comunicación se evidencia, junto con la salud y la alimentación, como una de las tres grandes necesidades del ser humano. La conexión digital es vital para las personas, para las empresas, para las sociedades y para las economías. En las redes de Telefónica en España, se han llegado a registrar picos de hasta un 45% en banda ancha fija y de hasta un 25% en banda ancha móvil, así como de un 70% en voz. Telefónica tiene 1,6 millones de kilómetros de fibra óptica desplegados lo que nos hace ser líderes en Europa y Latinoamérica. Además, la tecnología 4G de Telefónica tiene el 97% de cobertura en Europa y el 75% en Latinoamérica y el 5G se está desplegando en España, Brasil, Reino Unido y Alemania en este año 2020.
Lo que pasa por nuestras redes no es solo voz o datos. Lo que pasa por nuestras redes es la vida humana y la solución a las necesidades de los seres humanos. La desigualdad es el mayor reto al que nos enfrentamos. Hay que garantizar que la mayor parte de la población tenga acceso a la tecnología y a las oportunidades que brinda el nuevo mundo digital.
Es hora de acometer una verdadera transición digital, y ya no basta con adaptarnos: hay que anticiparse y liderar esa transformación. Ustedes como líderes públicos tienen el compromiso y la vocación de servicio para anticipar los escenarios y tomar las decisiones que culminarán en una efectiva transformación de las sociedades.
Necesitamos, más que nunca, un Pacto para gestionar la transición digital poniendo a las personas en el centro. Este Pacto Digital presupone un nuevo dialogo entre los gobiernos, la sociedad y el tejido empresarial e implica defender nuestros valores sin olvidar los derechos fundamentales en esta era. Este es el camino hacia una sociedad más sostenible, justa e inclusiva.
Este pacto debe traducirse en una mejora de las habilidades digitales de las personas. Telefónica hace un llamamiento a favor de la educación y capacitación digital de los trabajadores y estudiantes a todos los niveles, y una actualización de la legislación social y laboral en consonancia con el momento que vivimos. Necesitamos nuevas reglas, basadas en valores, que tendremos que escribir. La clave es actualizar el estado de bienestar poniendo al día los valores que compartimos: la democracia, los derechos humanos (ahora digitales), la privacidad, la soberanía, etc.
Desde Telefónica queremos contribuir en la creación de este Nuevo Pacto Digital, asegurando que las personas y las sociedades puedan beneficiarse de los cambios que está generando la digitalización, para que nadie se quede atrás en este acelerado nuevo mundo tecnológico.
Este Programa de Liderazgo Público Iberoamericano aborda aspectos transcendentes hacia este nuevo Pacto Digital. Las sesiones y temáticas tienen un encaje a medida a las grandes cuestiones que nos plantea la transición tecnológica de las sociedades y economías: Las promesas y desafíos del Big Data y del Blockchain; La robotización, la inteligencia artificial y teletrabajo como palancas de reconfiguración del trabajo; Las redes sociales digitales, la ciberseguridad y geopolítica son temas de actualidad que inciden directamente en la construcción de nuevos futuros.
Estoy segura de que este Programa constituye un espacio privilegiado para el intercambio de conocimiento y experiencias entre los líderes públicos que participan y que la riqueza de los debates e ideas asegurará la definición de nuevas políticas digitales. Por ello, os doy la bienvenida una vez más, con el deseo de que su participación sea fructífera y que estos frutos sirvan para reforzar aún más nuestros vínculos iberoamericanos.
Un saludo muy cordial,