La Universidad Complutense organiza cada año un programa de Cursos de Verano, cuyo plazo de matrícula se acaba de abrir, y que en este 2023 contempla más de 60 actividades formativas organizadas en colaboración con diferentes instituciones, entre ellas, la Fundación Carolina. ¿Qué objetivo persigue la Universidad Complutense con estos cursos de verano anuales?
Los Cursos de Verano Complutense representan una gran oportunidad para abrir un diálogo plural, crítico y constructivo sobre los temas de mayor interés para nuestra sociedad.
El programa se compone de una selección de propuestas que recibimos en la universidad en un formato accesible, destacando la excelencia académica, la oportunidad, pertinencia y autofinanciación como criterios principales para formar parte del mismo. El principal objetivo que buscan los Cursos de Verano es el de ofrecer a la sociedad en su conjunto, y a la comunidad académica en particular, un espacio de libertad para el desarrollo de foros de discusión temáticos sobre todas las ramas del saber.
Para este año 2023 y teniendo en cuenta la orientación hacia las cuestiones de más actualidad que inspira habitualmente esta cita, tanto en lo que compete a la realidad española como a lo que sucede a nivel global, ¿cuál es el enfoque o líneas temáticas que estructuran la programación? ¿qué destacaría de la oferta académica?
Partiendo de la base de que es difícil establecer líneas concretas cuando se ofrecen programas en las cuatro grandes áreas del saber: humanidades, ciencias sociales y jurídicas, ciencias experimentales y ciencias biomédicas, destacarían los siguientes cursos y encuentros en la XXXVI edición:
En ciencias experimentales, se abordarán los límites del conocimiento en nanociencia con la presencia del Premio Nobel Ben Feringa, así como el desafío de la transición energética con un curso monográfico sobe el Hidrógeno; los retos ambientales a los que se enfrenta nuestro planeta y el cambio climático se debatirán en al menos cuatro cursos, sobre emergencia climática, la eficacia de la evaluación ambiental, la circularidad en la metalurgia y la sostenibilidad de la industria textil. Además, la exploración espacial y la tecnología del terreno completan esta área de conocimiento.
En humanidades destaco la celebración del centenario de la muerte del gran pintor Sorolla y el curso de escritores de novela histórica, entre otros.
Ciencias biomédicas despliega una pléyade de temas de elevado interés social: COVID persistente; dolor pélvico que afecta al 26 % de la población; la resistencia a antibióticos (una nueva plaga del siglo XXI); los nuevos paradigmas en la vacunación de virus respiratorios; la obesidad y el trastorno metabólico; la importancia de la prevención en la salud, y los retos de innovar en el sistema sanitario, son algunas de las propuestas de mayor interés.
Ciencias sociales, como viene siendo habitual, es el área de mayor número de actividades programadas. Cursos en colaboración con prestigiosísimas instituciones como la propia Fundación Carolina, el CESEDEN, la Fundación Policía Española, los principales sindicatos, Partidos Políticos o el CES, entre otras. Los temas son variadísimos y destaca el papel de la Presidencia Española en la UE; la proyección de España en Iberoamérica; Derechos Humanos; Geopolítica; Turismo, así como cuestiones de género y diversidad componen esta amplia y variada programación.
La programación de esos cursos parece buscar un diálogo entre las cuestiones más técnicas y una aproximación a la realidad social y cultural en su estado actual. ¿Cómo valoran esta fórmula? ¿Cuál es la importancia de generar estos espacios que nos permitan pensar las aportaciones de lo concreto en el marco más general del estado del mundo actual?
La Universidad Complutense es una universidad global con grandes investigadores e investigadoras en todas las áreas de conocimiento; dada su pluralidad académica, generar una programación de esta riqueza surge de manera espontánea. Solo hay que recoger los intereses de la comunidad académica para generar propuestas solventes de interés social. Desde mi punto de vista, los cursos tienen un papel capital en la reflexión y proyección social de la universidad a la sociedad con todo lo que ello implica. Cada vez es más evidente el papel del conocimiento global que surge a través de la interacción social, incluso en las áreas de ciencias experimentales clásicas. Desde un punto de vista de evaluación ex-post, las valoraciones de las últimas ediciones no han podido ser más positivas por parte del público asistente.
Una de las novedades de este año es la de contar con un país invitado, México. ¿Qué supondrá esta presencia destacada en las actividades previstas para este año? ¿Cómo se va a materializar en la programación?
La internacionalización es un eje transversal en la política universitaria, En este contexto, hemos generado la figura de país invitado y no podía ser otro país que México por su vinculación histórica con la UCM. Un gran número de docentes complutenses colaboran en proyectos con colegas mexicanos; en México hemos desarrollado diez Escuelas Complutenses Latinoamericanas en tres universidades distintas del país, y numerosos estudiantes mexicanos pueblan los grados y posgrados complutenses. La acogida por parte del Sr. Embajador de México no ha podido ser más entusiasta y agradecemos su generosidad al patrocinar eventos culturales y poder contar dentro de la programación de actividades culturales con la conferencia extraordinaria de Jorge Volpi. Confiamos plenamente en que la decisión de invitar a un país cada año permita mejorar las excelentes relaciones que mantenemos con numerosas universidades a lo largo y ancho del mundo.
La Universidad Complutense y la Fundación Carolina colaboran desde hace años en diferentes programas formativos, a través de varios convenios suscritos entre ambas instituciones. ¿En qué consiste esta colaboración?
La Fundación Carolina realiza un trabajo impagable para el Estado favoreciendo la integración de numerosos estudiantes en diferentes universidades mediante programas específicos. En este sentido la colaboración con la UCM no es una excepción. Además de los programas comunes con otras universidades, con la Fundación Carolina organizamos programas ad hoc; concretamente en Cursos de Verano y en la Escuela Complutense de Verano. Esperamos seguir aumentado la colaboración y sería fantástico que fuesen socios de uno de nuestros programas más relevantes desde el punto de vista de la internacionalización, la Escuela Complutense Latinoamericana, que se realiza dos veces al año en diferentes países de América Latina con docentes complutenses y de la universidad asociada.
Fundación Carolina organiza el curso “La Cooperación Española y la Solidaridad Global: una agenda transformadora” que permitirá examinar el proceso de reforma de la ley de Cooperación española -materializada en la recientemente aprobada Ley 1/2023, de 2 de febrero, de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global- y dialogar sobre su alcance e implicaciones. ¿Qué interés cree que tiene esta formación en el contexto de la programación para 2023, y a quien se dirige principalmente?
Es un tema extraordinariamente relevante en la proyección internacional de España. El desarrollo de este nuevo marco jurídico, en el cual la Fundación Carolina ha tenido un papel esencial, permitirá más flexibilidad y trasparencia en los proyectos de cooperación. Es un curso que ha generado una gran expectativa y que previsiblemente tendrá un gran número de estudiantes, de diferentes ámbitos de conocimiento, interesados en los proyectos de cooperación. Tenemos plena seguridad en que los debates y reflexiones del curso serán de interés para la sociedad en general y para la Fundación Carolina en particular.