Rebeca Grynspan nació en San José, Costa Rica, en 1955. Fue elegida por unanimidad secretaria general iberoamericana en la Reunión Extraordinaria de Ministros de Relaciones Exteriores celebrada en Ciudad de México el 24 de febrero de 2014. El 1 de abril de ese año comenzó su mandato, que en 2018 fue renovado por otros cuatro años.
En 2010 fue elegida secretaria general adjunta de las Naciones Unidas (ONU) y administradora asociada del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Entre 2006 y 2010 fue directora regional para América Latina y el Caribe del PNUD.
Antes de incorporarse a la ONU fue vicepresidenta de Costa Rica (1994- 1998). También se desempeñó como ministra de Vivienda, ministra coordinadora de Asuntos Económicos y Sociales, y viceministra de Finanzas.
Además, fue miembro del Panel de Alto Nivel sobre Financiación para el Desarrollo convocado por el entonces secretario general de la ONU, Kofi Annan, en 2001.
Reconocida defensora del desarrollo humano, ha contribuido a centrar la atención del mundo y de América Latina en temas importantes como la reducción de la desigualdad y la pobreza, la equidad de género, la cooperación Sur-Sur como instrumento para el desarrollo y el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), entre otros.
Fue también delegada de la ONU en la Comisión para la Reconstrucción de Haití, un grupo compuesto por el Gobierno haitiano, el expresidente de Estados Unidos Bill Clinton y otros destacados socios internacionales.
En junio de 2014, asumió como presidenta del Consejo de Administración del Instituto Internacional para el Medio Ambiente y Desarrollo (IIED, por sus siglas en inglés), una de las organizaciones más influyentes en la investigación de políticas en el mundo, que se dedica a la interacción entre el desarrollo y el medio ambiente.
Grynspan participa en el comité directivo del SUN Movement de UNICEF “Scaling-up Nutrition”, en el Consejo de Gobierno de la Sociedad para el Desarrollo Internacional (SID), una red global de individuos y profesionales dedicados al desarrollo, y en la Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo de la OIT, entre otras entidades.
Además de su experiencia como conferencista y asesora de numerosas organizaciones e instituciones internacionales, ha formado parte de iniciativas fundamentales de la ONU, como el grupo de trabajo del Proyecto del Milenio sobre Pobreza y Desarrollo Económico y el Panel de Alto Nivel sobre Financiación para el Desarrollo.
En 2014 y 2015 fue elegida como una de los 50 intelectuales más influyentes de América Latina. En 2016 pasó a formar parte del Patronato del Instituto Complutense de Estudios Internacionales (ICEI) de la Universidad Complutense de Madrid. En 2017 recibió el Reconocimiento a la Excelencia Forbes y el Gobierno de España le concedió la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X El Sabio.
Grynspan es Licenciada en Economía de la Universidad de Costa Rica y Master en Economía de la Universidad de Sussex, y fue investida Doctora “Honoris Causa” por la Universidad de Salamanca, la Universidad de Extremadura y la Universidad Europea gracias a su trayectoria profesional.